A solo 60 kilómetros de Berlín se esconde un lugar que nadie espera

A tan solo una hora al sur de Berlín, escondido en el paisaje de Brandeburgo, se encuentra uno de los destinos más inesperados de Alemania. Lo que alguna vez fue un enorme hangar para dirigibles se ha convertido en un paraíso tropical abierto todo el año que atrae a miles de visitantes cada día.

Un refugio cálido en pleno invierno

Mientras en el exterior las temperaturas invernales suelen caer por debajo de cero, entrar en el Aerium se siente como viajar a otro mundo. En su interior, el aire se mantiene a unos agradables 25 °C, lleno del aroma fresco de plantas tropicales, un contraste perfecto con el clima frío de Alemania.

El gigantesco hangar es una verdadera obra de ingeniería: 360 metros de largo, 213 metros de ancho y 106 metros de altura. Originalmente construido para enormes aeronaves de carga, fue adquirido en 2003 por una empresa malasia y transformado en lo que hoy conocemos como Tropical Islands Resort, uno de los espacios cubiertos más sorprendentes de Europa.

Una selva tropical bajo un mismo techo

Una vez dentro, los visitantes son recibidos por altas palmeras, flores coloridas y el suave sonido del agua. Caminos serpenteantes conducen a través de paisajes de selva tropical, lagunas cristalinas y pequeñas playas de arena. Aves exóticas, plantas coloridas y una iluminación envolvente crean la sensación de estar en una isla lejana, sin salir de Europa Central.

Ya sea descansando junto al agua, nadando bajo cascadas artificiales o explorando los senderos entre la vegetación, la experiencia es inmersiva e inolvidable.

La escapada perfecta cerca de Berlín

Lo mejor de todo es su cercanía: a solo 60 kilómetros de Berlín, Tropical Islands Resort es el destino ideal para quienes buscan calor y luz durante los largos inviernos grises de Alemania. Familias, parejas y viajeros en solitario pueden disfrutar de un auténtico ambiente tropical —sin necesidad de tomar un vuelo largo.